Estoy cansado de hacerle el juego a este mundo mercantilista. A partir de hoy cosecharé todos aquellos sentimientos de placer que no me cuesten dinero y que por otro lado al mismo tiempo sean saludables. Investigaré cada día nuevas formas de placer que no me cuesten mucho dinero y con las cuales pueda vencer mi sentimiento de soledad y pasármelo bien.
Me acercaré cada vez más al mundo íntimo de los demás, por medio de un superior desarrollo de mi capacidad de observación y reflexión.
Fomentaré una vida ordenada y sin excesos, donde cada cosa tenga su propia lógica de ser y de suceder.
Compraré cuando tenga verdadera necesidad de una cosa. No compraré cosas para almacenarlas y luego no utilizarlas. No compraré por comprar. Hemos convertido la vida en un mercado de ladrones y bandidos, en el que auténticamente nos bombardean día y noche para crearnos necesidades que antes no teníamos. Y estas nuevas necesidades que nos crean nos hacen cada vez más esclavos del dinero, y nos han hecho pensar que no podemos gozar y pasárnoslo bien sino gastamos dinero. Y tenemos que gastar muchas veces un dinero que no tenemos porque nos han hecho sentirnos infelices. Que felices seríamos todos si miráramos un poco más en nuestro interior .
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