Puente de Lata de Dúrcal

 ¡ Fascinante historia del Puente de Lata de Dúrcal! 

En el corazón del Valle de Lecrín, el Puente de Lata, también conocido como Puente de Hierro, se alza como un emblema de Dúrcal y una joya de la ingeniería del siglo XIX.  Su historia, llena de curiosidades y transformaciones, es un viaje en el tiempo que no te puedes perder. 

 Orígenes en Gor (1890-1912)

Construido en los talleres Lecog de Bélgica, este puente de celosía metálica fue diseñado para la línea ferroviaria Guadix-Baza, cruzando el arroyo de Gor. Se dice que un discípulo de Eiffel participó en su creación, lo que le da un aire a la icónica Torre Eiffel, pero en horizontal.  Sin embargo, un corrimiento de tierras en 1905 comprometió su estabilidad, obligando a los pasajeros a cruzarlo a pie mientras el tren pasaba vacío. En 1912, fue reemplazado por otro puente y quedó abandonado. 

 Un nuevo hogar en Dúrcal (1924)

En 1920, la Sociedad de Tranvías Eléctricos de Granada vio una oportunidad: reutilizar este gigante de hierro para conectar Granada con Dúrcal. La empresa alemana Dormunde Union desmontó el puente, lo acortó de 400 a unos 200 metros y lo instaló sobre el río Dúrcal. Inaugurado el 18 de julio de 1924, se convirtió en parte de la línea de tranvías eléctricos que transportaba pasajeros y mercancías.  Incluso se complementó con un teleférico de 38 km hasta Motril, el más largo de Europa en su época, aunque dejó de funcionar en 1958 por robos. 

 De viaducto a icono cultural

El tranvía dejó de circular en 1974, y en 1976 el puente estuvo a punto de ser demolido. Gracias a la intervención de Vicente González Barberán, se salvó y fue cedido a la Diputación de Granada en 1983. Hoy pertenece al Ayuntamiento de Dúrcal y es exclusivamente peatonal, ofreciendo vistas espectaculares del valle del río Dúrcal y Sierra Nevada.  Con 199,93 metros de longitud y 53 metros de altura, su estructura de acero cromado sigue impresionando. 

 Actualidad y turismo

En 2024, el Puente de Lata celebró su centenario con actividades que resaltaron su valor histórico. Además, se ha convertido en un punto clave para el turismo: desde paseos familiares hasta rutas de senderismo como la del río Dúrcal.  También es un lugar único para los amantes de la aventura, con planes para consolidarlo como un referente de puenting en Andalucía.  Su estado de conservación es excelente, gracias a trabajos de mantenimiento que preservan este patrimonio arquitectónico. 

 ¡Visítalo y vive la historia!

El Puente de Lata no es solo una estructura, es un símbolo de la resiliencia y la innovación. Cruza sus tablas, siente el vértigo de su altura y déjate envolver por el paisaje del Valle de Lecrín. 

 ¿Lo has visitado? ¡Cuéntanos tu experiencia! 

 Ubicación: Dúrcal, Granada. Acceso fácil desde el casco urbano o el polígono industrial (Calle Trinchera).